Tecnicas para memorizar

¿Te has dado cuenta de que tu memoria graba las cosas extrañas que ves? Todo aquello que sobresale o resalta por su anomalía es registrado de manera especial en nuestra mente porque se sale del registro común al que nuestra atencion está acostumbrada y cuyos elementos hemos cristalizado en nuestro pensamiento. Una técnica basada en esta recordación de lo excéntrico para blindar tu memoria y ser capaz de recordar cualquier cosa: una lista de mercado, teléfonos, nombres, datos... Sólo debes seguir estos pasos y ponerlos en práctica tan a menudo como te sea posible para que tu cerebro genere nuevos códigos e incorpore esta forma de pensar y memorizar.

1. Crea un ancla Con esta técnica infalible podrás recordar lo que quieras Convierte esas cosas abstractas que el cerebro se resiste a memorizar (como números o nombres quizá) en cosas visuales. Para esto debes asignarles formas, colores o texturas, es decir, elementos asociados a la percepción sensorial y a datos que difícilmente olvidarás. Entre más curioso, extravagante y extraño sea el elemento que escojas para asociar con el símbolo que quieres memorizar, mejor. Supón que quieres imaginar el rostro de alguien que acabas de conocer y asociarlo a su nombre. Podrías buscar en tu cabeza a un famoso que tenga el mismo nombre de tu nuevo contacto. En seguida busca una marcada característica de ese famoso que elegiste o una imagen curiosa en donde se haya retratado (un desnudo, una foto vergonzosa o muy graciosa), entre más ingeniosa y alejada de la realidad sea la imagen, mucho mejor.

 

2. Convierte el sonido en imagen recuerdos Para recordar el nombre de tu nuevo contacto no intentes pensar en cómo se escribe sino en cómo suena. Divídelo en fonemas o sílabas y asocia cada una de ellas a una imagen.

3. Asocia las imágenes para construir un segmento narrativo mente Ahora intenta crear una escena en donde interactúen las imágenes que acabas de inventar, generando un fragmento narrativo, es decir, una pequeña escena. Por último, intenta crear un vínculo entre la imagen con la que asociaste el rostro (la foto de un famoso) y la escena que creaste con las imágenes correspondientes a la sílaba. Aquí te damos un ejemplo. Alguien acaba de conocer a una mujer llamada Julia y quiere recordarla. Asocia su rostro a una foto de Julia Carlington desnuda. Enseguida divide el sonido del nombre «Julia» en sus sílabas y crea imágenes para cada sílaba: «Ju» por ejemplo, suena a «justicia», y «lia» a «liar». Después inventa una escena narrativa en donde interactúen las dos imágenes de las sílabas: un juez liando un cigarrillo. Finalmente sólo deberás asociar el «ancla» (Julia Carrington desnuda) y el sonido visual de su nombre. Y por más extraño que parezca, la asociación permanece. Un uso cotidiano de esta técnica es una lista de supermercado. Para recordar secuencias de cosas sólo es necesario hacer un viaje narrativo que las relacione. Así, en lugar de almacenar datos, recordarás una historia coherente con elementos que necesariamente se relacionan entre sí a partir de cierta lógica.

Un ejemplo de recorrido narrativo que podría servir para recordar una lista de mercado: Imagina que hubo un terremoto y hay un charco de miel que se derrama sobre la calle porque su frasco se rompió, a la miel se pegan inevitablemente los huevos que ruedan calle abajo, tras los huevos corre una gallina que acaba de ponerlos. La gallina está hambrienta porque hace días que no come maíz ya que en el campo en donde vive sembraron espárragos en lugar de tomates y maizales. Esta pequeña escena te permitirá recordar que debes comprar: *Miel *Huevos *Pollo *Maíz *Espárragos *Tomate Si practicas hacer estas narrativas en el acontecer diario de tu vida podrás no sólo mejorar tu memoria y dejar de depender de dispositivos, sino también abrir paso a la creatividad. Esta técnica, podría decirse, es una manera de manipular a tu propia mente para que se asombre de sí misma.